Así empieza Expert@ Millonari@

Hace más de una década, cuando monté mi primer negocio, el único marketing que utilizaba era el “marketing de la fe”: esperar cada día que sucediera un milagro divino y me trajera un nuevo cliente. 

Como mucho los buscaba a puerta fría, con el resultado de que me cerraban esa puerta en los morros la mayoría de las veces. Ahora lo pienso y me parece de una gran inocencia. 

¿Cómo podía esperar que los clientes vinieran si no tenía un sistema para que eso sucediera?

En 2013 llegué a encontrarme en una situación límite, con la cuenta corriente literalmente en números rojos. Provengo de una familia humilde y nunca he tenido detrás un respaldo económico ni una red que me salvara de las caídas, así que tropecé y me di un buen golpe. Coincidió además con la separación de mi socio, que me dejó muchas deudas. 

Tuve que volver a empezar de cero, peor aún, de menos que cero. Fue muy difícil, muy duro. En los primeros meses ni siquiera podía pagar la cuota de autónomos, para que te hagas una idea…

Haciendo un enorme esfuerzo y gracias a una tarjeta de crédito que hasta aquel momento nunca había utilizado, empecé a formarme con los mejores expertos en negocios del mundo, todos ellos multimillonarios gracias a sus métodos. 

Trabajé duro para desarrollar mi propio método de crecimiento empresarial a partir de lo que había aprendido de mis mentores. 

Porque uno de los requisitos básicos para el éxito de un negocio es trabajar y trabajar (el que te diga lo contrario, te está vendiendo humo), aunque también tener una buena guía.